La vasta trayectoria astística de Tránsito Cocomarola no puede ser comentada en unas pocas líneas. Por ello sólo incluiremos a las primeras etapas de la labor artística, comentando las primeras actuaciones del famoso "Taitá del Chamamé".
Mario del Tránsito Cocomarola nace el 15 de agosto de 1918 en la localidad de San Cosme, más precisamente en la "Estancia El Albardón", en la Provincia de Corrientes. Allí al influjo de dos culturas, de dos herencias, entre canciones de cuna en guaraní de su madre correntina y melodías de lejanas tierras más allá del océano, traídas en la memoria y la nostalgia de su padre, inmigrante italiano. Allí comienza la historiade un grande de la música chamamecera. El primer contacto que Transito Cocomarola tuvo con la música fue a través de su padre, que era acordeonista, y fue ése (el acordeón) el instrumento que acarició desde pequeño y el primero que aprendío a tocar. Y con sólo trece años, calzando pantalones largos para aparentar más edad y ayudado por las sombras de la noche, actuaba clandestinamente en lugares de vida nocturna para ganarse así sus primeros pesos. Fue también el acordeón con el cual compuso sus primeros temas y con el que siguió grabando algunos años después, aún cuando ya ejecutaba bandoneón.
En forma alternada grababa con uno y otro instrumento. En la década de 1930 se integra a varios Conjuntos y en Corrientes ya actúa, con los dos instrumentos mencionados, en la primera orquesta folklórica de la provincia que dirigía el maestro Ricardo Suárez. Posteriormente, ya en Buenos Aires, ejecuta con “ Los hijos de Corrientes” y el “ Trío típico correntino” que dirigía Emilio Chamorro. También con el conjunto de Osvaldo Sosa Cordero; con el “Conjunto Irupé”, junto a Roberto Ferradás Campos y Santiago Barrientos en 1946; con el conjunto “Los Kunumí” junto a Samuel Claus y Emilio Chamorro; posteriormente, con Ramón Estigarribia y con la agrupación del santaluceño Miguel Repiso; participa en algunas grabaciones con el “Trío Taraguí” de Pedro Sánchez y comparte una larga duración con Julio R. Chapo.
Integrando el conjunto “Los hijos de Corrientes” y en una sesión de grabación, un directivo del sello discográfico lo escucha y queda gratamente sorprendido por la calidad de sus interpretaciones y le propone grabar con su propio nombre. Ese fue el punto inicial que le daría a Cocomarola la posibilidad de trascender al llegar al disco como director de su propia agrupación: El ya legendario y muy recordado “Trío Cocomarola”. Esto ocurre a fines del año 1941 y el día 19 de mayo de 1942 graba sus primeros diez temas en el sello Odeón con acordeón de dos hileras y bandoneón. En este sello discográfico deja impreso un total de 124 temas.
¿Quiénes integran los primeros tríos junto al “Taitá del Chamamé”?
En las primeras diez grabaciones participan, indistintamente, los guitarristas: Colon Cobas, Policarpo Benítez, Pedro Pascasio Enríquez y Luís Ferreyra; ingresa luego a dúo “Los Zorzales”, compuesto por Ramón Hurtado e Isaura Guerreño, hasta el año 1945. Desde 1945 hasta 1948 el dúo Cejas – Ledesma, con José Cejas y Juan Alberto Ledesma. Entre los años 1948 a 1952, grabaron o integraron el conjunto del “Taitá”, Nieves Rodríguez - conocido como “Tabú, el indio del Norte” Emeterio Fernández, Odilio Godoy, Manuel Gómez, José Cejas –que permaneció un tiempo más- y Antonio Nicolás Niz, en una primera etapa. Posteriormente también se integra al “Trío Cocomarola” el dúo de voces Quiroz – Úbeda, compuesto por Gabino Quiroz y Pascasio Úbeda; este último formaría, tiempo después el afamadísimo dúo Vera – Lucero, otras voces se unen al conjunto: son las de Simón de Jesús Palacios y Santiago Nicolás Verón, a quienes se agregan, el acordeón de Roque Librado González y, nuevamente, la guitarra de Antonio Niz.
Estos son algunos de los conjuntos que Cocomarola integró en sus primeros años de actuación y con los que llevó al disco temas realmente inolvidables.
Se lo ve en fotografías, de septiembre de 1942, integrando el conjunto de Marcos Herminio Ramírez, acordeonista, y las guitarras de Manuel Gómez y Luís Acosta.
Casi al finalizar la década de 1940, el inolvidable bandoneonísta Eustaquio Miño tenía en su formación un dúo de voces que se abría camino a paso firme en el firmamento chamamecero. Cocomarola, que ya lo conocía, lo invita a integrar su conjunto, hecho que ocurre en el año 1952. Estamos hablando de Salvador Miqueri y Eustaquio “Nene” Vera, el afamado dúo Vera – Lucero. Entre los años 1952 y 1956 graban con el “Taitá” una serie de exitosos temas y es, sin duda alguna, este periodo donde se aglutinan factores que convierten en un éxito clamoroso los temas que componen Cocomarola y Salvador Miqueri, aunándose el estilo inconfundible del dúo de voces y el toque justo, equilibrado y armonioso del bandoneón del “Taitá del Chamamé”.
Sin duda alguna que el cantos chamamecero, con la aparición de estos valores, de divide en antes y después de Vera – Lucero. Con Tránsito Cocomarola dejaron grabadas sus voces en veinte temas y todos, sin excepción, incuestionablemente, fueron éxitos. Recordamos algunos títulos: “Rojheyama”, “Para Ti”, “Compañera”, “El boyero”, “Zunilda”, “Chiripá”, “Retorno”, “Puente Pexoa”, “Imploración”, “Mi Selva Eterna”, “Rincón Dichoso”, entre otros.
Pero la vida y obra de Cocomarola no se detiene. Luego de incorporar a Roque L. González, en acordeón; a Juan Ayala, en contrabajo; a la guitarra de Antonio Niz, los dúos y tríos de voces son innumerables: Verón Palacios; Lisandro Cáceres - Evaristo Reyes – Hipólito Argentino Vargas; Gregorio Molina; Julio Godoy; Luís Soloaga; Ireneo Ramírez; Carlos Ramírez; Elpidio Verón Miño; Juan Ojeda; Alfredo Alejandro Almeida; entre otros.
Cocomarola deja grabados en el sello “Odeón” 124 temas y en el sello “Phillips” 250; esto nos demuestra la vigencia de un genio de la música folklórica Correntina. Los temas registrados en S.A.D.A.I.C. superan dos centenares.
Inesperadamente, Tránsito Cocomarola fallece un 19 de septiembre de 1974. Por ley Nº 3278 del gobierno correntino se intituyó esa fecha como “El día del Chamamé”.