UN RIO DE ARTE
Miércoles, 29 de marzo de 2023
Con el chamamé sutil de Chango Spasiuk y la gran voz de Jairo, finalizó el Otoño Polifónico
La cuarta edición del gran festival riocuartense tuvo un cierre de lujo ante un numeroso público en el Anfiteatro del Parque Sarmiento.
Jairo repasaba en bellas versiones sinfónicas los más grandes éxitos de su prolífica carrera junto a sus músicos y a la Banda Sinfónica de la Provincia de Córdoba, dirigida por Andrés Acosta.
En la segunda agradable noche de otoño al aire libre del Polifónico, ante un numeroso público en el Anfiteatro Municipal del Parque Sarmiento, el cantante de Cruz del Eje presentaba sus enormes canciones con colores diferentes y, seguramente iban a sonar Caballo loco, Milonga del trovador y Morir enamorado, entre muchas otras.
Antes, el encargado de abrir la última noche del gran festival riocuartense, fue ese notable compositor e intérprete chamamecero que es Chango Spasiuk. Con su acordeón, al frente del ensamble integrado por Marcos Villalba (percusión, guitarra y voz), Pablo Farhat (violín), Diego Arolfo (Voz y guitarra), Eugenia Turovetzky (chello) y Enzo Demartini (acordeón verdulera y guitarra), el Chango brilló con la sutileza de una bella estética en composiciones propias como La suite del nordeste, El camino y Tristeza, entre tantas otras y ajenas de Piazzolla, Coromarola y Spinetta, anda menos.
Innovador, profundo, emotivo y maravilloso, su concierto fue uno de los puntos más altos del evento local.
Todo el día
A la mañana y a la tarde, el festival vivió sus últimas intervenciones artísticas, con las presentaciones de artistas locales: la Cantoría San Ignacio, dirigida por Juan Ignacio Noroña, en la Iglesia Catedral y el Coro Juvenil Municipal, dirigido por Luciana Cazzolla y con el director invitado Matías Saccone, en el Salón Blanco para cantar sus Historias de rock.
A la tarde, en el Teatro Municipal, se concretó otro gran homenaje del Otoño Polifónico: a Jaime Torres con el espectáculo ¡Hacia La América!, música, danza e imágenes, bajo la dirección de Federico Sciciliano.
Sábado de tangos y mucho más
Recién el sábado, en la sexta noche del festival, la lluvia dio un impasse y, al fin, se pudieron realizar los conciertos centrales en el hermoso, cómodo y de buena acústica (todo lo que no tiene el Club Banda Norte) Anfiteatro del Parque Sarmiento.
En una hermosa noche otoñal, sonaron tangos de los mejores, primero con los nuestros, la Orquesta Típica Fandango, dirigida por Diego Seitz, con la participación de los cantantes Pablo Gonella y Walter Cisneros, quienes entonaron Qué me van a hablar de amor, Garúa, Grisel y Uno, entre muchos clásicos del 2x4. Después, un lujo de la música ciudadana en vivo: la Orquesta Nacional de Música Argentina “Juan De Dios Filiberto”, bajo la batuta del director invitado Néstor Marconi y la profunda voz de Adriana “La gata” Vare. Afiches, Malena,
Pompas de jabón, Cristal y Pa' que bailen los muchachos, fueron parte de otro de los grandes conciertos del evento local.
Los artistas locales también fueron protagonistas el sábado a la mañana y a la tarde con la presentación del Ensamble De Música Popular UNRC, dirigido por Walter Cisneros, en el Museo Histórico Regional; la Big Band del Conservatorio, bajo la batuta de Maxi Brito, en Plaza Roca y la destacada soprano Laura Rizzo, junto al tenor Enrique Folger y el pianista Eduviges Picone, para entregar el hermoso espectáculo Historia de un Amor. Boleros en escena en el Teatro Municipal.
Lluvia de talentos
Puntal publicaba en su portada del martes pasado, Lluvia de talentos, por el alto nivel artístico vivido el lunes, en el primer día del festival y por el (mal) tiempo que pronosticaba agua y más agua para toda la semana. Y, lamentablemente, se cumplió. En esta cuarta edición, la lluvia fue protagonista e hizo que se debieran realizar 5 noches en el Club Banda Norte y que algunas intervenciones artísticas se cambien de lugar o se suspendieran.
Así las cosas, el balance general de este 2023 del Otoño Polifónico es excelente, fue como un río de arte, creció el río cuarto y creció el festival, en un día más completando una semana entera para llenarse de las más variadas músicas, en cantidad de conciertos (más de 40 se pudieron realizar) y en un alto nivel artístico que tuvo picos de jerarquía como el espectáculo Freude! Freude! Beethoven: el piano como orquesta y el concierto solista de Horacio Lavandera, además, claro, de las presentaciones de los nombres más populares como Baglietto-Sosa-Vitale, Raly Barrionuevo o Jairo.
De aciertos y errores se hacen los festivales, habrá detalles por revisar (sobre todo en los horarios de los conciertos centrales y la capacidad del Coloso), pero el Otoño Polifónico va recién por su cuarta edición y, lo más importante, es que logre una continuidad con este vuelo artístico que lo reconoce como único en el país.