Corrientes
Martes, 7 de septiembre de 2021
Profundo pesar por el fallecimiento de "Rada"
En horas de la tarde se conoció la lamentable noticia del fallecimiento de la madre de Silvia Muñoz Velcheff. La querida "Rada" hoy sencillamente se hace eterna y celestial. Aquejada en los últimos años por varios problemas de salud y aún habiéndole hecho frente y ganado la batalla al COVID19 hoy Dios la recibe en sus brazos para darle descanso eterno a su alma.
" Adiós reina mía, mi hermosa, mi fortaleza...Dios te reciba en sus brazos, junto a esos amores increíbles que la vida nos prodigó. Gracias Mamá, solo tengo un gracias inmenso para decirte deseando Paz para tu viaje eterno. Ser tu hija es lo mejor que me pudo pasar! Vuela alto!!!!!", expresó en sus redes sociales la Presidente de Fundación Chamamé y Directora ejecutiva de Cadena de Radios, Silvia Muñoz Velcheff .
Equipo y personal de la emisora y medios digitales hacemos llegar nuestras condolencias a la familia Rojas-Muñoz Velcheff.
MAMI NECESITO QUE SEAS ETERNA
Querida Ma:
Te quiero pedir una cosa. Necesito que seás eterna. Que tu abrazo sea infinito y que nunca se muera tu voz en el teléfono. No puedo imaginarme llamar y que nadie me pueda pasar con vos, aunque sea sólo para decirnos hola. No creo real que algo fuerte suceda en mi vida sin que te lo pueda contar para que me digás que esté tranquila y así mi alma explosiva te haga caso de inmediato.
En el orden de mis necesidades para ser feliz, están en primera fila tus ojos, a veces tan pensativos, analíticos y callados…otras más conversones, dejándose sentir, más libres, muertos de risa y más compas de mis ocurrencias.
En esa primera fila, tus manos. En los peores momentos ellas me han acariciado y tienen la magia de traspasar mi piel. Llegan a la esencia de lo que soy, sin podértelo ocultar, porque me conocés desde adentro, desde mi alma hasta lo que todos los demás ven.
Qué perfecto Dios, hacernos cómplices siendo tan distintas. Pero qué maravilla somos juntas, cuántas conversaciones de dos puntos de vista tan distantes y al final nos tomamos el café del mismo pichel y eso es lo que vale.
Mami, yo quiero regalarle a tu vida muchos momentos más en que te sintás verdaderamente feliz. Quiero caminar con vos abrazada a tu hombro, sin que jamás nadie nos diga que eso no se puede hacer por siempre.
Necesito que seás eterna y reconozco la gran dosis de egoísmo que tengo al decírtelo. Además, no debo ignorar que eternas son nuestras almas. Pero bueno, aún te tengo aquí y te puedo leer esto con mi voz y vos escucharlo en silencio, como hacés cuando te digo que te amo y sonreís como si alguien te estuviera dando un premio. Respirás profundamente y luego me decís que vos también me amás. Salgo de la cochera y me tirás un beso. Debiera ser ley que nunca se acabe ese besito tirado que cae inmediatamente en mi corazón de chiquilla y me erizo de la alegría de tenerte. Gracias Mami, en serio, de veras gracias, te amo mucho más de lo que pueda decirte. Gracias Mami. Te amo.
R: Clara González