Alejandro Balbi
Lunes, 25 de abril de 2016
Cuatro décadas de historia, cuatro décadas de canciones
El artista se presentó el viernes pasado en el marco de un espectáculo intimista pero desbordado de público que lo pudo disfrutar.
Fueron poco más de dos horas de espectáculo, dos horas en que el artista se entregó a pleno. Él y su música fueron uno en una velada más que especial para Alejandro Balbi, porque con el show que brindó el viernes comenzó a celebrar sus cuatro décadas con este arte a través del cual se transmiten sensaciones y sentimientos, poesía y música.
El público que lo acompañó, vale decirlo, superó las expectativas. Mesas repletas en el espacio de la Costanera Sur y en cada una de ellas, el músico podía encontrarse con un rostro en el que identificó el acompañamiento de todos estos años. Algunos lo siguen desde hace mucho más tiempo, otros de menor antigüedad en su vida pero en definitiva, rostros que una vez más le dijeron presente, por amistad o por ser familia. Con ellos, el artista inició los festejos de sus 40 años con la música, que en 2016 tendrá muchas otras sorpresas.
Debo confesar que se me había pasado la fecha, quizás porque creía que eran 35, dijo con su particular sonrisa y reconoció que fueron sus más allegados quienes le hicieron notar y recordar sus inicios. Quizás por ello, Alejandro Balbi eligió mostrarse diferente -sin perder su esencia- y entregó lo mejor de sí en la noche del viernes pasado. En el show manifestó su felicidad por el grato momento que estaba viviendo y regaló canciones que lo acompañaron durante todos estos años de camino artístico, las que supo representar sobre los más destacados escenarios provinciales y regionales, y algunas incluso, pasarán a formar parte de un repertorio en custodia porque se animó a cantar nuevos temas; aquellos que no conocía o con los que no se había encontrado musicalmente hablando.
Esta apertura en su historia musical también fue parte de la velada porque con ella adelantó lo que se puede esperar del nuevo trabajo discográfico que ya está grabando y que será parte de los festejos por sus 40 años con la música. Quienes se acercaron hasta el escenario y lo pudieron disfrutar, se encontraron con una voz afinada, con buen fraseo, y un músico apasionado que dejó no sólo su voz sino también el cuerpo entero en cada uno de los temas que interpretó.
Cada tema que ofreció lo hizo desde el alma. Sorprendió. Si bien quienes siguen su carrera conocen de su esfuerzo y de la potencialidad de su voz, los temas elegidos y la excelencia musical que ofreció lograron una armonía más que interesante. La velada, sin lugar a dudas, sobresalió por ser un momento intimista -más allá de la cantidad de público- donde se pudo apreciar y disfrutar de un espectáculo que viene siendo pensado desde hace tiempo para este momento. Un espectáculo donde nada estuvo librado al azar, todo lo contrario. Y ello sin lugar a dudas, quedó al descubierto desde el inicio. Sobre este escenario se animó incluso a invitar a algunos amigos que lo acompañaron con distintos temas. Entre ellos estuvieron Eduardo González Miranda, Diego Gutiérrez y Guido Encinas; el pequeño sobre quien Alejandro tiene el mejor concepto.
Si estas son las nuevas generaciones, no tenemos que tener miedo de retirarnos cuando llegue el momento porque nuestra música está más que bien custodiada, admitió. Fue sin lugar a dudas, una noche mágica para él en la que puedo ver en el público a los amigos de siempre, a la familia, a los nuevos amigos, aquellos rostros que están más allá de todo y que fortalecen el alma. Es cierto que su voz puede sonar en el marco de la Fiesta Nacional del Chamamé, en el carnaval o en un espacio donde lo melódico es el género musical que invita a contactarse con este arte que permite transmitir las más diversas sensaciones a través de la poesía y la música, pero el viernes su voz fue la protagonista del escenario de Costanera Sur y los que compartieron con él este momento pudieron aplaudirlo de pie.
Esa sensación le demostró una vez más que la decisión que tomó hace cuatro décadas, cuando subió por primera vez a un escenario, era la correcta. El repertorio elegido estuvo muy vinculado al chamamé, música que energiza su sangre y lo convierte en un verdadero cantor. Muchas de estas canciones -adelantó- serán parte del nuevo disco que presentará en 2016 como parte de sus festejos por los 40 años con la música. Hay que dejar en claro que no son 40 años con el chamamé, sino con la música, señaló para no crear confusiones. El artista -de la mano de Wothan producciones- se prepara para vivir un año particular. En esta oportunidad Alejandro Balbi estuvo acompañado por un importante grupo de músicos de la talla de Alejandro -Tato- Ramírez en acordeón, Matías Duete en batería, Sebastián Sánchez en bajo, Guillermo Solís en guitarra y Joselo Báez en teclado.