Tránsito Cocomarola
La trayectoria artística de Tránsito Cocomarola le valió el apodo de
“El Taita del Chamamé”.
Este 19 de septiembre se cumple un aniversario más de su fallecimiento y se celebra en su honor EL DIA DEL CHAMAME. Por Enrique Piñeyro
La trayectoria artística de Tránsito Cocomarola le valió el apodo de “El Taita del Chamamé”.
Mario del Tránsito Cocomarola nació el 15 de agosto de 1918 en la localidad de San Cosme, más precisamente en la
“Estancia El Albardón”, en la provincia de Corrientes. Allí al influjo de dos culturas ,de dos herencias, entre canciones de cuna guaraní de su madre correntina y melodías de lejanas tierras más allá del Océano, traídas en la memoria y la nostalgia de su padre , inmigrante italiano.
Allí comienza la historia de un grande de la música chamamecera. El primer contacto que Tránsito Cocomarola tuvo con la música fue a través de su padre que era acordeonista, y fue ese (el acordeón) el instrumento que acarició desde pequeño y el primero que aprendió a tocar. Y con solo trece años y calzando pantalones largos para aparentar más edad y ayudado por las sombras de la noche, actuaba clandestinamente en lugares de vida nocturna para ganarse así sus primeros pesos. Fue también el acordeón con el cual compuso con sus primeros temas y con el que siguió grabando algunos años después aún cuando ya ejecutaba el bandoneón. En forma alternada ,grababa con uno y otro instrumento.
En la década de 1930 se integra a varios conjuntos y en Corrientes ya actúa con los dos instrumentos ya mencionados en la primera orquesta folklórica de la provincia que dirigía el maestro Ricardo Suárez. Posteriormente ya en Buenos Aires ejecuta con “Los hijos de Corrientes” y el “Trío típico Correntino” que dirigía Emilio Chamorro. También con el conjunto de Osvaldo Sosa Cordero, con el Conjunto Irupé junto a Roberto Ferradás Campos y Santiago Barrientos en 1946,con el Conjunto”Los Kunumi” junto a Samuel Claus y Emilio Chamorro, posteriormente con Ramón Estigarribia y con la agrupación del santaluceño Miguel Repiso, participa en algunas grabaciones con el “Trio Taragui” de Pedro Sánchez y comparte un larga duración con Julio R Chapo.
Integrando el conjunto “Los Hijos de Corrientes” y en una sesión de grabación, un directivo del sello discográfico lo escucha y queda gratamente sorprendido por la calidad de sus interpretaciones y le propone grabar con su propio nombre. Ese fue el punto inicial que le daría a Cocomarola la posibilidad de trascender y llegar al disco como director de su propia agrupación :el ya legendario y muy recordado “Trio Cocomarola”. Esto ocurrió a fines del año 1941 y el 19 de mayo de 1942 graba sus primeros diez temas en el sello Odeon con acordeón de dos hileras y bandoneón. En este sello discográfico deja impreso un total de 124 temas.
Los primeros tríos junto al Taita del Chamamé en las primeras diez grabaciones fueron integrados por los guitarristas: Colón Cobas, Policarpo Benitez, Pedro Pascasio Enríquez y Luís Ferreira, luego ingresa el dúo de “los Zorzales” compuesto por Ramón hurtado e Isauro Guerreño, hasta el año 1945.Desde 1945 hasta 1948 el dúo Cejas- Ledesma, con José Cejas y Juan Alberto Ledesma.
Entre los años 1948 al 1952 grabaron con Cocomarola: Nieves Rodríguez conocido como tabú, El Indio del Norte, Emeterio Fernández, Odilio Godoy, Manuel Gómez, José Cejas que permaneció un tiempo más y Antonio Nicolás Niz en una primera etapa. Posteriormente también se integran al trío Cocomarola el dúo de voces Quiróz-Úbeda, compuesto por Gabino Quiróz y Pascasio Úbeda, este último formaría tiempo después el afamadísimo dúo Úbeda-Chavez . A fines del año 1956 y luego de la desvinculación del Dúo Vera-Lucero, otras voces se unen al conjunto; son las de Simón Jesús palacios y santiago Nicolás Verón, a quienes se agregan el acordeón de Roque Librado Gonzalez y nuevamente la guitarra de Antonio Niz.
Estos dúos y tríos fueron los que integró Cocomarola en sus primeros años e actuación y con los que llevó al disco t5emas realmente inolvidables.
Se lo ve en fotografías de Septiembre de 1942, integrando el Conjunto de Marcos Herminio Ramírez, acordeonista, y las guitarras de Manuel Gómez y Luís Acosta.
Casi al finalizar la década del 1940, el inolvidable bandoneonista Eustaquio Miño tenía en su formación un dúo de voces que se habría caminos a pasos firmes en el firmamento chamamecero. Cocomarola, que ya los conocía, los invita a integrar su conjunto, hecho que ocurre en el año 1952.El dúo era integrado por Salvador Miqueri y Eustaquio “Nene” Vera, el afamado dúo Vera-Lucero.
Entre los años 1952 y 1956 graban con el Taita del Chamamé una serie de exitosos temas y es sin duda alguna este período donde se van sumando factores que convierten en un éxito clamoroso los temas que componen Cocomarola y Salvador Miqueri, aunándose el estilo inconfundible del dúo de voces y el toque justo, equilibrado y armonioso del bandoneón del Taita del Chamamé.
Con la aparición de estos valores chamameceros, el canto se divide en un antes y un después de Vera-Lucero. Con Tránsito Cocomarola dejaron grabado en sus voces veinte temas y todos-sin excepción-incuestionablemente fueron éxitos: Rojheyama, Para Ti, Compañera, El Boyero, Zunilda, Chiripá, Retorno, Puente Pexoa, Imploración, Mi Selva eterna, Rincón dichoso, entre otros.
Pero la vida y obra de Tránsito Cocomarola no se detiene. Luego de incorporar a Roque. L González en acordeón, Juan Ayala en contrabajo, a la guitarra de Antonio Niz, los dúos y tríos de voces son innumerables: Verón Palacios; Lisardo Cáceres-Evaristo reyes-Hipólito Argentino Vargas; Gregorio Molina; Julio Godoy; Luis Soloaga; Ireneo Ramírez, Carlos Ramírez, Elpidio Verón Miño, Juan Ojeda, Alfredo Alejandro Almeida; entre otros.
Cocomarola deja grabados en el sello Odeón 124 temas y en el sello Phillips 250,esto deja demostrado la vigencia de un genio de la música folklórica correntina. Los temas registrados en SADAIC superan dos centenares.
Inesperadamente, Tránsito Cocomarola fallece un 19 de septiembre del año 1974.Por Ley N°3278 del poder Ejecutivo de Corrientes se instituyó esa fecha como
“El Día del Chamamé”.