Hoy vengo a cantarte con esta guitarra, La canción más linda que escucharás.
Que te diga como siguiendo tu huella Te seguí el destino de esta soledad.
Que marcó tu vida con esa tristeza, Que de tanto en tanto me viene a encontrar Cuando te recuerdo deshojando ausencias, En caminos largos de este antiguo andar.
En noches de estrellas de tu serenata, En patios bañados de luna y malvón Le contaste siempre a esa novia eterna Que aunque partas ella será ilusión. Que soñaste siempre entre tus canciones Que un día volvías a darle tu amor Pero la distancia se llevó el recuerdo y volviste solo, guitarra y canción.
Viejo cantor de luz en plena madrugada, Quiere nombrarte mi emoción del corazón Para cantarte que el designio de tu tiempo, De andar distancias con tu estrella me alcanzó Y desde adentro puedo hablarte como siempre, Que este destino soñador que va en tu voz No me da tiempo de quedarme en el camino, Para fundirme en un te quiero de los dos
Te vi en muchas noches, bajando escenarios, Abrazado siempre a ese diapasón De tu antigua pena, de soñarla a ella Trepada hasta el cielo de tu corazón Con esa tristeza de buscarla siempre, En alas del viento, abril y canción De fuego encendido, postergando siempre, Arrojado y tuyo, de andar sin amor.